Dua Lipa: Studio 2054 o la reinvención de la música en directo
DESDE EL TRONO DEL POP, LA DIVA OFRECIÓ UN ESPECTACULO EN VIVO INOLVIDABLE
ALBERT JANES
En medio de la pandemia del Covid, los conciertos de música se han visto mermados hasta su casi desaparición, algo que nos ha truncado una fuente de vida a los melómanos. Para endulzar y sobrellevar esta situación, la londinense Dua Lipa ha preparado una experiencia única de música en vivo para poder disfrutarla desde el sofá de casa, con un derroche de creatividad artística verdaderamente impresionante.
Rodado en una especie de nave industrial en Londres, el despliegue de medios es espectacular: varios escenarios, luces de colores, tubos de neón, bolas de espejos, iluminaciones tenues, atmósferas retrofuturistas, cuidadas coreografias, bailarinas, vestidos deslumbrantes y colaboraciones de lujo han dado forma a esta nueva forma de expresión musical en vivo.
El concierto empieza con “Future Nostalgia”, tema que da nombre a su reciente trabajo de estudio presentado este 2020 en medio de la pandemia, y que nos sitúa de lleno en la ambientación que Dua nos ha preparado para esa noche: neones de colores por todas partes, humo y luces mágicas para disfrutar del mejor Dancepop del momento. Aparece con un body blanco (que irá cambiando a lo largo de la actuación), acompañada de todo un elenco de bailarinas que la arroparán durante todo el concierto.
El segundo tema de la noche es “Levitating”. Las bailarinas perfectamente sincronizadas ejecutan la performance capitaneadas en todo momento por una Dua magnífica y deslumbrante. Ataviadas con vestidos elegantes y brillantes, recrean un ambiente de club en los años 70. Acompañan en la actuación una teclista, un batería, un bajista, un coro de voces y un guitarrista. Este último ejecuta un espectacular solo en esta canción. Estilo y glamour por todos lados.
“Pretty Please” es la siguiente canción, sutil y sugerente, y que enlaza con “Break My Heart”, dónde Dua nos lleva a un viaje en el tiempo a través de un túnel hecho con neones circulares luminiscentes de colores infinitos, que acompañan a la perfección la visita musical a los años 80. Aparece entonces en escena FKA Twigs, quién ejecuta una coreografía de pole dance, y nos adelanta una canción conjunta llamada “Why don’t you love me”.
Dua se dirige hacia el nuevo escenario: una pista de baile, con barra incluida, de un club nocturno. Dentro de una “jaula” metálica en medio de la pista a modo de cabina de DJ, nos encontramos a Blessed Madonna. Desde allí lanza el tema “Physical”, uno de los hits más exitosos de Dua, con una gran bola de espejos colgada del techo, y en medio de un ambiente de fiesta. Este escenario y su ambientación puede recordar a salas de conciertos como Razzmatazz, en Barcelona, con este estilo industrial. Al acabar la canción, hay un impás donde Madonna pincha una especie de Batucada, con todo el mundo bailando, y mediante este ritmo frenético enlaza con el siguiente tema: “Cool”, canción preciosa del disco, en el cual Dua se mantiene de firme eje alrededor del cual las bailarinas van dando vueltas patinando alrededor de la pista. La experiencia continua con un tour por la nave industrial, mientras nos deleitamos con el tema “New Rules”, de su anterior y primer álbum Dua Lipa.
A partir de aquí, empieza el carrusel de colaboraciones que Dua nos había anunciado: primero con Miley Cyrus en “Prisoner”, brillante tema en el que ambas colaboran en el nuevo disco de Cyrus, con toques retrofuturistas muy del estilo synthwave. Luego aparecen J Balvin, Bad Bunny y Tainy en la canción “Un día (One day)” acompañando a la estrella desde la distancia, con influencias mucho más urbanas. Luego llega el turno de Angèle, con quién Dua canta el tema “Fever”. La compenetración entre ellas es evidente y esto nos hace disfrutar aún más de la actuación.
Entonces nos trasladamos a un sótano, con una tabla de mezclas preparada, y allí nos espera la DJ Buck Betty, quién nos recibe pinchando “One Kiss”, canción del 2018 de Dua junto con Calvin Harris. Aquí nos metemos plenamente en una atmósfera de club, algo lógico debido a las claras sonoridades House del tema. Sin abandonar esta clandestina pista de baile, aparece en escena Kylie Minogue entre el público para cantar las piezas “Real Groove” y “Electricity”, en medio de una gran fiesta donde todo el mundo baila sin parar.Para bajar un poco el ritmo, todo para de repente, salimos del sótano, y le llega el turno a Elton John, quién nos deleita con su voz y piano en el tema “Rocket Man”, interpretado desde la distancia.
En la recta final del concierto, oímos la canción “Technologic” de Daft Punk de fondo como preludio a la interpretación que Dua hace de “Hallucinate” y, para concluir, del tema “Don’t Start Now”, otro de los hits que la ha lanzado a la fama y éxito, y que Dua interpreta de una forma vibrante y emocionante, dejándonos atónitos y maravillados por todo el show, condensado en poco más de una hora.
Con esta actuación, Dua ha conseguido eclipsar hasta a la misma luna que la acompañaba en su coche retro para presentarnos el álbum Future Nostalgia, y lo ha hecho con una actuación desbordante de energía, creatividad, talento y pasión. Nos ha hecho olvidar por unos momentos lo que supone no poder disfrutar de la música en directo como antes. Por esto y por haber sacado un impresionante trabajo como es Future Nostalgia, tiene más que merecido el trono de diva del pop.