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Israel Nash, la promesa cumplida del folk rock norteamericano

El artista norteamericano afronta su primera gira por salas españolas en 11 años

 

MARÍA CANET

En Estados Unidos, tierra de  sueños y promesas, Israel Nash puede presumir de haber cumplido la suya propia. Su nombre es en la actualidad uno de los más destacados dentro de la música norteamericana, especialmente, en la rama del folk rock. Su carrera despegó en 2009 con el elepé New York Town (Desert Folklore Music), donde mostró querencia por el folk crudo en la senda lo-fi aderezado con eléctricas y harmónicas, muy próximo a Ryan Adams.

Quince años (y siete discos) después de aquel debut, el de Missouri ha ensanchado su registro. Dejó la gran manzana y se instaló en Dripping Springs (Texas), donde construyó su estudio en un rancho y comenzó a experimentar con nuevas sonoridades. Topaz (Loose Music, 2021), su penúltimo trabajo donde sacaba a relucir su vertiente más soul, pero también su saber hacer con atmósferas crecientes a lo Neil Young y coqueteos con la psicodelia, es buena prueba de ello. Una apuesta por melodías etéreas cercana a compañeros como Ray LaMontagne o My Morning Jacket, que consolidó el pasado octubre con la publicación de su último larga duración, Ozarker (Desert Folklore, 2023) bajo la producción de Kevin Ratterman (productor de los anteriormente mencionados).

Cada tema conforma una constelación propia en un álbum de infinitos matices, donde los instrumentos adquieren distinto nivel de protagonismo a medida que se profundiza en su escucha; la luz que desprenden individualmente, deslumbra en el conjunto de la melodía. El carácter épico de algunos medios tiempos como ‘Can’t Stop’ , ‘Going Back’ o ‘Ozarker’ remite a Bruce Springsteen, en cortes donde las contundentes guitarras arropan a los sintetizadores. La vertiente más rockera aparece en ‘Firedance’ o en las alargadas notas eléctricas de ‘Shadowland’, mientras el deje dylaniano reaparece en ‘Midnight Hour’.

Composiciones como ‘Roman Candle’ o ‘Travel On’ , donde teclados luminosos se conjugan con un muro de acústicas y destellos eléctricos como manda la escuela Tom Petty & The Heartbreakers y ese poso de nostalgia alegre en la lírica que tan bien manejaba el californiano. ‘Pieces’ y ‘Lost in America’ conforman los cortes más melancólicos con melodías pausadas de corte acústico donde Nash disecciona el dolor que provocan las decepciones propias y ajenas, mientras se pregunta qué lugar ocupa el pasado en la mochila que todos cargamos mientras caminamos con dirección al futuro.

Tras once años sin subirse a los escenarios de las salas españolas, este mes de febrero, los amantes del folk rock podrán volver a disfrutar del directo de Israel Nash junto a su banda en 6 fechas por diferentes enclaves del país.

 

20 DE FEBRERO. KAFE ANTZOKIA, BILBAO
21 DE FEBRERO. FACTORÍA, AVILÉS

22 DE FEBRERO. COPÉRNICO, MADRID
23 DE FEBRERO. LOCO CLUB, VALENCIA
24 DE FEBRERO. ROCK & BLUES, ZARAGOZA
25 DE FEBRERO. UPLOAD, BARCELONA